MANIFA EN IZNAJAR

Yo no traje el siluro a Iznajar, ni los esturiones, ni los mejillones cebra... Y estoy bastante seguro de que quienes lo hicieron no son para nada desconocidos, y se relacionan con la pesca de un modo mucho más comercial que todos los carposos apasionados que, cuánto honor, leéis esto que escribo...

Además ya sabéis que la gravedad del asunto me preocupa y la he denunciado en mis entradas siempre que pude.

Pues ahora, aunque lo de las especies invasoras me parece grave y sus razones no le faltan a la Junta para tomar esta determinación (Ver disposición adicional tercera, lo demás es una orden de vedas muy normalita…), nos castigan como a niños malos prohibiendo la pesca en probablemente el más importante sistema hídrico de Andalucía, junto al Guadalquivir; cosa que por cierto seguro que importa un pimiento a los culpables de la invasión. No es solamente que no nos dejen pescar... pensad en las consecuencias que esto va a tener para los ingresos en la zona...

Por eso creo que es importante acudir a esta manifestación del cartel, el que pueda… Tenemos que velar por nuestros intereses ya que nadie lo va a hacer por nosotros ni en las federaciones ni en la junta…

El agravio comparativo, la discriminación, es mucho más grave cuando muchas otras cuencas españolas invadidas por las mismas especies alóctonas no sufren estas consecuencias, sino más al contrario. Sistemas fluviales de Aragón, Valencia y Catalunya sufren las mismas plagas (y otras) y sin embargo en ellos la pesca no se limita… sino que se potencia.

Mucho estoy reflexionando últimamente sobre el (mal) modo en que lo comercial se relaciona con las pasiones que tenemos… Esto afecta a todo lo que rodea a la pesca, la amistad, los clubes… Cuando los intereses de otros no son tan “apasionados” como los nuestros, pero se aprovechan de esa misma pasión, las fricciones son inevitables.

A ver si hay suerte y no son cuatro gatos… a mí me pilla a 3500 kilómetros, pero quería poner mi granito de arena…

¡Carposos! ¡A las barricadas!

A.